Lecciones Modernas de Santa Magdalena Sofía Barat a través de sus Cartas

5 de noviembre 2025
Perseverar en la Misión: Fidelidad al Llamado de Dios en Tiempos de Prueba
Queridos hijos e hijas en el Corazón de Jesús,
En medio de las fatigas de cada día, de las incomprensiones del mundo y de nuestras propias debilidades, quiero recordarles que quien cree en Dios no debe mirar atrás. La vida que Él nos confía puede estar llena de espinas, pero también está colmada de Su gracia. Y es esa gracia, invisible pero real, la que nos sostiene cuando todo parece desmoronarse.
No faltan obstáculos exteriores: críticas injustas, falta de apoyo, pobreza material o indiferencia. Tampoco faltan las luchas interiores: el cansancio, la duda, la tentación de abandonar. Sin embargo, ¿acaso no fue el mismo Jesús quien cargó la cruz entre desprecios? ¿No fue su fidelidad hasta el final la que nos abrió las puertas de la salvación? Por eso, no temamos las contrariedades; temamos más bien perder el celo y la confianza.
Perseverar no significa no sentir miedo o cansancio, sino seguir adelante aun cuando el alma se encuentre herida. Es caminar confiados sabiendo que Dios escribe su voluntad en medio de nuestras fragilidades. Nosotros sólo somos instrumentos; Él es el Maestro que guía cada paso, aun cuando no entendamos el camino.
Les suplico, pues, que no se dejen abatir por la crítica ni por el juicio ajeno. Cumplan su deber con discreción, con amor, con la mirada puesta en el Corazón de Jesús. Allí encontrarán la fuerza para comenzar cada día de nuevo, para ofrecer sus sufrimientos por el bien de todos.
Y si alguna vez, en la soledad o el desánimo, sienten que ya no pueden más, acudan a la ORACION. El Señor no abandona a quien confía. Él toma nuestras lágrimas y las convierte en semillas de gracia. Él ve el sacrificio oculto, la entrega silenciosa, la fidelidad que nadie aplaude, y en eso se complace.
Perseveren, pues, con humildad y valentía. No esperen recompensas terrenas, sino la dulce certeza de haber amado hasta el extremo. El mundo cambia, las fuerzas humanas fallan, pero quien permanece en la voluntad de Dios nunca será vencido.
Con afecto profundo y oracion constante,
Este artículo fue creado por el Comité de Página Web de UNASC, utilizando herramientas de IA chatGPT, inspirado en el legado de Santa Magdalena Sofía Barat